Perros queridos con un buen amo y también con un buen hogar hay miles, pero cierto también es que una cantidad importante de canes que viven a la intemperie bajo puentes o basurales, animales “de la calle”.
Hablamos de un ambiente hostil, donde los perros tienen que convivir con el hambre, el frío, la soledad y como si todo esto no fuera poco también con el maltrato de personas sin alma.
La realidad de los perros de la calle es triste y desafortunada, aunque sí hay unos pocos que logran salir de ese “hoyo”, logran tener un antes y un después de haber sido rescatados, como así lo constataremos a continuación en imágenes en las que el cariño, el cuidado y un buen hogar hicieron la diferencia entre el “cielo y la tierra”.
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