El Hospital Clínico Veterinario de la Universidad de Córdoba lleva 17 años atendiendo caballos y mascotas como único centro con esas características en Andalucía
El Hospital Clínico Veterinario de la Universidad de Córdoba nació hace 17 años como continuación de una pequeña clínica existente junto a la antigua Facultad y hoy Rectorado, en la avenida Medina Azahara. Al mudarse todas las facultades agroalimentarias al campus de Rabanales, se planificó y construyó un verdadero hospital donde se pudiesen atender en conjunto los animales tanto en medicina como en cirugía y reproducción, y con una mayor cabida.En el hospital se atiende sobre todo a equinos y animales pequeños. “Los equinos son una demanda constante en Andalucía, sobre todo antes de la crisis. En cuanto animales pequeños de compañía, siguen estando al lado de la gente y acompañándonos mucho, a pesar de los vaivenes de la economía”, señala la directora del hospital desde hace tres años, Rocío Pérez.
El centro también atiende especies exóticas, pero no ganado vacuno y estabulado. “Es que es más práctico atender a estos animales en el campo, acudiendo a las ganaderías. Además, el ganado vacuno tiene otras enfermedades, características y otro tipo de manejo; por ejemplo, se suele operar con el animal en pie”, añade la veterinaria.
El Hospital Universitario atiende todo tipo de enfermedades y a lo largo de todo el proceso médico, desde el diagnóstico básico a la derivación a los distintos especialistas. “También disponemos de zonas de aislamiento de completa asepsia para cuando se detecta una enfermedad infecto-contagiosa tanto para animales de compañía como para caballos”, apunta Rocío Pérez.
El tamaño del centro se ha quedado un poco justo después de casi dos décadas de uso. Esto es debido, sobre todo, a los avances tecnológicos. “Tenemos proyectos de colaboración con profesionales de medicina humana y realmente las técnicas que se ponen al servicio de los animales nos obligan a una demanda mayor de espacio hospitalario”, destaca la directora. Además, el número de pacientes también va incrementándose. “A veces nos imaginamos cómo se haría un hospital con hasta doble planta. Eso significa que somos optimistas para el futuro”.
El hospital está abierto a todo el mundo. Se paga igual que en una clínica privada, con precios estándar para que no haya oferta desleal, pero la atención es más completa. “En una clínica hay un compañero o dos como mucho que tienen que hacer medicina y cirugía. Aquí nos estamos especializando tanto que en cirugía tenemos especialistas de determinadas técnicas”, termina la directora del hospital.
Uno de esos especialistas es el veterinario David Argüelles. De hecho, es el último fichaje del equipo. Argüelles es un cirujano que lleva una semana en el hospital después de una estancia en la Universidad de Helsinki, en Finlandia. “Estuve cuatro años allí y luego estuve trabajando en varios hospitales de Europa”, explica. En esta primera semana de vuelta a España le ha resultado muy satisfactorio participar en la formación de los estudiantes de Veterinaria. “Estoy muy contento del trabajo que hay y de la respuesta de los veterinarios, que ya están enviando casos para operar. Me siento cómodo, bien y tranquilo con los alumnos”, prosigue.
Córdoba es una referencia de veterinaria, sobre todo en caballos, y Argüelles es un especialista en cirugía equina. “Las patologías más comunes que vemos son la cirugía abdominal o el cólico quirúrgico. Estamos haciendo muchas artroscopias porque los caballos pueden tener alguna enfermedad del crecimiento que se llama osteocondrosis”, explica. “También vemos pequeños fragmentos de huesos libres o cartílagos que están dañados y necesitamos hacer artroscopias para retirar esos fragmentos y que el caballo no desarrolle enfermedades degenerativas articulares cuando sea un atleta y se ejercite”, termina.
No hay comentarios:
Publicar un comentario