El Ayuntamiento de Jaca estudia la posibilidad de construir un albergue municipal para animales abandonados en la zona. La instalación resulta muy necesaria debido a que los perros y gatos acogidos en la actualidad por la Sociedad Protectora de Animales local se hallan desde hace años en un edificio muy degradado de las afueras de la ciudad.
El asunto ya ha empezado su tramitación y se encuentra en fase de información, según explica el alcalde, Juan Manuel Ramón, que señala que ya en la pasada legislatura su partido, el PSOE, presentó una moción para mejorar el servicio.
De momento, existe un borrador del proyecto que están examinando tanto los técnicos municipales como la veterinaria de zona. El mayor inconveniente es que el terreno donde se pretende construir el albergue no es de carácter municipal, por lo que la iniciativa se halla todavía en una fase embrionaria. "La idea llega a tiempo para incluir una partida para el albergue en el presupuesto del 2016", precisa Juan Manuel Ramón.
En la actualidad, la Sociedad Protectora de Animales de Jaca, que realiza una gran labor pese a sus escasos medios, tiene 50 perros y 40 gatos abandonados en acogida, a la espera de que alguien los adopte. "En otras ocasiones hemos llegado a tener hasta 70 perros", indica Chus, una de las cinco personas voluntarias que de manera más asidua se encargan de cuidar a los animales.
"El problema es que la instalación en la que estamos de forma provisional se ha ido estropeando con el paso del tiempo y no resulta habitable", comenta. Se trata de una antigua edificación que perteneció a una empresa eléctrica sobre la que se han hecho reformas para acoger a las mascotas.
Los techos del habitáculo de los gatos no solo corren riesgo de desmoronarse. En cuanto a los perros, se hallan en una especie de jaula gigante que hace unos años se dotó de una envoltura para que los animales no estuvieran expuestos al frío y la lluvia.
"Ha llegado un momento en que no hay suficiente sitio para albergar como es debido a los gatos y a los perros", lamenta Chus.
Y lo cierto es que el trabajo de la protectora no cesa. De hecho, recoge animales abandonados y perdidos tanto de la ciudad de Jaca como de todo su entorno. "En Jaca no se abandonan más mascotas que en otros sitios, si acaso menos", subraya la responsable de la entidad, que se financia gracias a que organiza mercadillos y a que recibe subvenciones del ayuntamiento del municipio.
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