A pesar de que la fría, tenebrosa y
espiritual noche de Todos los Santos se acerca, el sol dice que no, que
no se va. Las altas temperaturas que vive el país han provocado que el
conocido veranillo de San Miguel se convierta en una estación del año
más, el Veroño. Así que mientras el sol aguante, vale la pena hacer un
último recorrido por aquellas playas que merecen ser visitadas.
Atención: lleve comida para animales, le hará falta.
Los
gallegos tienen uno de los litorales más bellos de toda la geografía
patria. Altas o Baixas, las rías de Galicia esconden pequeños paraísos
que bien pasan por la cinematográfica costa de California -o Galifornia,
como ustedes prefieran- . De ambos territorios pueden retratarse bellas
instantáneas de dunas de arena fina y blanca, imponentes acantilados o
jóvenes surfeando. Sin embargo, lo que tienen el litoral de Galicia y no
el de California son cochos, porcos, xabalíes, marráns, es decir, cerdos.
Desde hace cuatro año, los mariscadores
que cuidan con mimo la célebre almeja de Carril, en la ría de Arosa,
conviven con una serie de especies con la que un hombre de mar no está
acostumbrado. Se trata de unos cerdos que han colonizado la isla de
Cortegada, en concreto unos cerdos salvajes de mar que han sabido
adaptarse a un ecosistema marino. Los pescadores comienza a estar hartos
de estos mamíferos, pero como forman parte del Parque Nacional de las
Illas Atlánticas de Galicia no se tocan. Así, el visitante galiforniano
puede ver a cerdos gallegos -si se dejan ver porque son bastante
esquivos- nadando en el océano Atlántico.
La foto de un cerdo gallego tomando un baño en el océano Atlántico bien vale un selfie, un Instagram y un buen hashtag del tipo #Aquíenlaplayita. Sin embargo, y mal que pese a los gallegos, ese mismo selfie
puede hacerse en otra isla y en el mismo océano. El paraíso de las
Bahamas tiene su propia playa con jabalíes, la 'Pig Beach' en la isla
deshabitada de Gran Major Cay.
Los cerdos bahameños son un auténtico
espectáculo . El propio director general del Ministerio de Turismo, Joy
Jibrilu, declara en la página oficial de turismo de país
que están "orgullosos de ser el hogar oficial de los cerdos nadadores".
La 'Pig Beach' se ha convertido en una atracción ineludible de todo
aquel que viaja al paraíso de las Bahamas, y mucho tiene que ver el
carácter de estos mamíferos. Desde turismo del país se asegura que estos
cerdos son muy adorables y están acostumbrados a nadar con los
turistas, pero sobre todo a que les den comida.
La última de las playas de este recorrido
también tiene animales, pero algo más ariscos. De nuevo en una isla pero
en el mar Mediterráneo, la playa italiana de Su Pallosu (Cerdeña) es
destino turístico porque es el hogar de una colonia de gatos desde hace
más de un siglo. Pues según recoge la Asociación cultural amigos de Su Pallosu,
los lugareños más mayores de la zona no han conocido esta playa sin
felinos y explican que pudieron ser traídos en barco para solucionar una
plaga de ratones. En estos momentos, esta colonia felina tiene 61
ejemplares que campan a sus anchas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario