Perro abandonado en una nave.
El Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia ha denunciado 214 infracciones administrativas cometidas por propietarios de animales en lo que va de año en la provincia, según la estadística facilitada por la Subdelegación del Gobierno.
La actividad habitual de esta patrulla incluye la prestación de servicios a los ciudadanos y ayuntamientos que solicitan su intervención para recoger animales abandonados o sueltos que, una vez identificados, son entregados a sus titulares, quienes son multados cuando se percibe falta de control.
En este sentido, el Seprona realiza «una intensa labor informativa para concienciar a los ciudadanos de este asunto y, en ocasiones, los agentes tienen que denunciar comportamientos para garantizar el bienestar de los animales», añaden las mismas fuentes de la Subdelegación en un comunicado. En la época estival suelen ser más frecuentes los casos de falta de vigilancia de estos animales, que en ocasiones causan accidentes o incidentes a personas o vehículos. Por ello, el Seprona recomienda a los propietarios o a las personas que estén al cargo de estos animales por vías y espacios públicos que los lleven controlados y sujetos con cadena, correa o cordón resistente; y en el caso de los calificados como potencialmente peligrosos, también con bozal.
«En otras ocasiones, el abandono, falta de cuidado o maltrato causa un enorme perjuicio al animal, incluso haciendo peligrar su vida o integridad», subrayan fuentes de la Subdelegación. Se recomienda a los dueños que adopten las medidas necesarias para los casos de ausencia temporal en la que no puedan cuidarlos, ya sea alojarlos en residencias caninas o centros de recogida autorizados, o cederlos a terceras personas que les puedan proporcionar los cuidados que necesitan.
Exigir factura
Asimismo, el Servicio de Protección de la Naturaleza aconseja adquirir animales siempre en establecimientos autorizados; exigir factura o 'ticket' de compra y cartilla sanitaria o pasaporte. Todos los animales de más de tres meses tienen que estar identificados con microchip, y recomienda también «desconfiar de precios anormalmente reducidos», además de «tener presente que son seres vivos que necesitan atenciones y control continuo», informa Ical.
Por último, el Seprona apela a la «sensibilidad personal» para tener los animales de forma permanente, «y no simplemente como mascotas temporales que cuando dejan de cumplir su objetivo se abandonan o se causa su muerte».
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