Una camada de gatitos huérfanos encontró a la mejor mamá adoptiva: una pastor alemán

La protectora de animales entregó a un voluntario una camada de gatitos recién nacidos que habían perdido a su madre. Como parte de su labor de voluntariado, debía alimentar a los bebés hasta que tuviesen la suficiente autonomía como para volver al recinto de la protectora y cuando se dispuso a ello descubrió que había alguien interesado en colaborar: la preciosa pastor alemán con la que convivía. Su nombre es Brooke y sin dudarlo, se encargó de limpiar y mantener a salvo a los gatitos mientras el voluntario les alimentaba con biberón