Está tan apasionada por ellos que fundó el Instituto Jane Goodall, una organización internacional para la protección de la vida salvaje que lucha por estos animalitos. Parte del trabajo que realiza el Instituto Goodall es verdadero trabajo de campo, no sólo papeleos. Esta vez han salvado a una chimpancé llamada Wounda, que traducido significa “cercana a la muerte”. Gracias al Centro de Rehabilitación para Chimpancés Tchimpounga (Parte también del Iinstituto Goodall), en el Congo. Esta conmovedora historia nos ha dejado entre lágrimas a todos…
Cuando encontraron a Wounda estaba a un paso de la muerte, por lo que el rescate tuvo que ser inmediato.
Gracias a la Doctora Rebeca Atencia, Wounda volvió de la mismísima muerte. Le dieron alimentos y la cuidaron con gran diligencia y mucho amor ♥
Estaba tan flaquita y desnutrida que un día más en ese estado habría significado una muerte segura… es por eso que su nombre es tan acertado y le recuerda a todos cuán afortunada es.
Cada mañana Wounda se bebía un litro entero de leche para el desayuno.
Poco a poco fue cobrando fuerzas y un buen día pudo sostenerse sola: Su recuperación no dio pasos atrás. 
En poco tiempo Wounda estuvo lista para volver a casa, con sus amigos chimpancés. Parecía contenta 
Gracias al Centro Tchimpounga, Wounda y muchos otros animalitos se salvan de destinos terribles a diario.
Llegó el día esperado: Pusieron a Wounda en una jaula para llevarla directo a la libertad.
Fue trasladada al Santuario para la Vida Salvaje de la Isla de Tchindzoulou, cerca del río Kouilou.
Ese era el lugar perfecto para comenzar de nuevo, libre por completo, llena de salud y vitalidad… Pero antes de irse, hizo algo verdaderamente hermoso ♥
Tomó a Jane en sus brazos y la apretó fuerte… Como diciendo “Gracias por todo”. Su rostro ya no era triste y cansado… Ahora sus ojos estaban llenos de brilo y esperanza.
Tanto los chimpancés como los humanos tenemos en común que nos encanta el contacto físico. Es una manera de transmitir emociones sin usar una sola palabra. ♥
Los animales no pueden hablar, pero eso no los hace tontos: Wounda sabía perfectamente que Jane era la responsable de las cosas buenas que le habían salvado y cambiado la vida ♥
Cuando Wounda demostró su agradecimiento y cariño, comenzó a explorar su nuevo hogar.
La emoción y la alegría de estar libre de nuevo se veían reflejados en su carita
Jane y Wounda supieron en ese momento que no era un completo adiós, sino un “Hasta luego”.
Al fin reunida con los suyos, ésta es una de las tantas vidas que Jane ha salvado gracias a su pasión.
El video muestra la despedida de estas buenas amigas. No te miento, es un momento sumamente emotivo porque el entendimiento del corazón es el más fuerte y hermoso de todos.
A veces olvidamos que los animales son seres vivos y sienten tanto dolor o felicidad como nosotros, los humanos. La caridad y e verdadero amor no conocen fronteras, ni entre diferentes especies.
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