Esta conmovedora historia ocurrió en San
Luis, cuando los nuevos dueños se mudaron a su recién comprada casa y
descubrieron que alguien se había dejado en el sótano un precioso perro,
encadenado y abandonado a su suerte.
“Me acabo de comprar una casa y hay un
pitbull encadenado en el sótano. No sé cuánto tiempo lleva ahí,” dijo el
nuevo dueño al personal de Stray Rescue St. Louis.
Los voluntarios acudieron corriendo a la
escena para rescatar al perro, que parecía muy feliz de verlos. “Cuando
abrimos la puerta del sótano y enfocamos la linterna, vimos un perro
moviendo la cola. Casi se estaba ahogando con la cadena de lo contento
que estaba de vernos. Cuando lo liberamos, no dejaba de saltar y de
darnos abrazos,” dijo a The Dodo la directora de comunicaciones del grupo, Natalie Thomson.
¿Y quién pudo haber dejado así al pobre
perro? Parece que había un okupa en la propiedad y había dejado un
montón de basura y otras cosas, así como al perro. Nadie sabe quién era o
por qué habría abandonado al perro. Lo que está claro es que no habría
sobrevivido mucho tiempo si no lo hubieran encontrado, ya que no tenía
comida ni agua.
Su personalidad y alegría han hecho que
el perro reciba el nombre de “Jumping Bean”. “Su personalidad es
adorable. Adora a todos a quienes conoce y quiere que le hagan caso. Se
asegura de no ser ignorado. Tiene mucha energía y afecto que dar.
Siempre está feliz,” dijo Thomson.
Aquí debajo puedes ver un vídeo del emotivo rescate de Jumping Bean, dinos qué te parece en los comentarios.
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