¡Por supuesto que sí! Que no lo veamos tan a menudo no significa que no pueda existir una buena relación entre personas y otros animales. Es por ello, que estas vacas nos han robado el corazón. Hemos recopilado 10 imágenes que son una verdadera lección de amor, respeto y ternura entre humanos y animales.
jueves, 31 de agosto de 2017
imágenes adorables de vacas que creen que son perros
Una de la cosas más divertidas que pueden suceder en el mundo animal es encontrarnos con animales que se comporten tal y como lo haría otra especie que no es la suya propia.
Dicen
que no hay mayor amistad verdadera que la que surge entre animales y
humanos. Los animales son leales y fieles durante toda su vida a sus
dueños, especialmente si estos crecen juntos y se forja una fuerte
relación desde muy pequeños. Con frecuencia solemos referirnos a los
perros como “los mejores amigos del hombre” pero, ¿y qué ocurre con el
resto de animales? ¿Acaso una vaca no puede ser tan amigable como lo son los perretes?
¡Por supuesto que sí! Que no lo veamos tan a menudo no significa que no pueda existir una buena relación entre personas y otros animales. Es por ello, que estas vacas nos han robado el corazón. Hemos recopilado 10 imágenes que son una verdadera lección de amor, respeto y ternura entre humanos y animales.
Estas
vacas que se comportan como perros, son la viva imagen de que cualquier
animal puede ser de lo más amoroso si se lo propone.
¡Por supuesto que sí! Que no lo veamos tan a menudo no significa que no pueda existir una buena relación entre personas y otros animales. Es por ello, que estas vacas nos han robado el corazón. Hemos recopilado 10 imágenes que son una verdadera lección de amor, respeto y ternura entre humanos y animales.
miércoles, 30 de agosto de 2017
Las selfies más divertidas y originales tanto de mascotas como de animales de las redes
Las mascotas aportan grandes beneficios a la
diaria del ser humanos desde una correcta salud emotiva hasta el control
de la presión arterial y alergias en los más pequeños, pero su compañía
y actitudes divertidas hacen la diferencia. A continuación la mejores
selfies de mascotas de las redes
Desde hace mucho tiempo se cree que los perros fueron los primeros
animales en ser domesticados por el hombre. Existen evidencias de que la
domesticación de los caninos tuvo lugar hace 15 mil años. Sin embargo,
la verdadera historia detrás de cómo los perros pasaron de lobos
salvajes a mascotas consentidas todavía es un terreno incierto para la
ciencia.
Estudios científicos
confirmaron que el origen del afecto entre el hombre y su perro puede
deberse al parentesco de temperamento entre ambos y una clara tendencia
de adoptar rasgos del carácter y actitudes de los seres humanos. La
humanización de las mascotas hoy se encuentra a flor de piel y
claramente se demuestra en las siguientes divertidas y originales
fotografías.
Tanto en jóvenes como en adultos, las selfies son un común denominador
de las redes y las mascotas no quieren quedarse atrás en esta nueva
tendencia. Sin lugar a dudas, estos animales tienen una gran capacidad
para mostrar su mejor y divertido perfil.
La ciencia también confirmó los beneficios de ver tantos videos como
fotografías de los mejores amigos del hombre, divertirse a través de las
mascotas trae aparejado una mayor capacidad de concentración, mayores
niveles de placer, un correcto desarrollo intelectual en los más
pequeños e incluso una mayor productividad laboral.
"Las conclusiones apoyan un modelo conceptual argumentando que la
felicidad obtenida al ver videos y fotos de mascotas de internet, puede
moderar la relación entre los motivos de dilación, la culpa y el goce",
aseguró la especialista Jessica Gall Myrick en su estudio publicado en sciencedirect.
Pero no solo ver sus fotos tienen una clara incidencia en el ser humano
en materia emocional, en muchas ocasiones una buena salud física
también esta relacionada con estos significativos acompañantes de vida.
Por ejemplo, los felinos no solo hacen su aporte en relación a
enfermedades cardiovasculares, también disminuyen la presión arterial,
regulan la ansiedad y los niveles de estrés por soledad. Por otro lado
una mascota en el hogar ayuda a tener menos probabilidades de contraer
alergias en edades tempranas. Como bien desarrollaron los autores Meer y Hesselmar concluyeron en un estudio.
"Tener un perro o gato como mascota durante los primeros años de vida
puede ser un factor protector contra las enfermedades alérgicas. La
exposición microbiana a temprana edad puede proteger contra enfermedades
alérgicas por una posible variación de la respuesta inmune",
concluyeron los especialistas.
Los beneficios de los animales en la vida del hombre son sin dudas
múltiples pero nada se compara con la diversión que estos pequeños
amigos peludos pueden aportar a la cotidianidad del ser humano.
martes, 29 de agosto de 2017
¿Cuáles son los animales más listos del planeta?
Aunque el ser humano se alza como la 'especie dominante', hay estudios que han demostrado que los animales poseen capacidades cognitivas nada envidiables a las del homo sapiens. Aquí te presentamos una lista de los animales más inteligentes.
Se supone que nosotros somos los 'seres dominante' en el mundo animal. Sin embargo existe una larga lista de especies cuyas capacidades les han valido el título de los 'más inteligentes'. Aquí te mostramos algunos:
ArdillaA pesar de su tamaño y de lo que pueda parecer, este pequeño roedor posee una gran memoria. Reconoce rutas por las que ha pasado y sabe distinguir entre aquellas por las que no debe volver a pasar.
Esconden el alimento en lugares que luego reconocen. Pixabay
Pulpo
Se considera el invertebrado más inteligente del planeta. Estos cefalópodos aparecieron hace 30 millones de años, aproximadamente. Son capaces de reconocer formas y texturas y guardarlas en su memoria, lo que les permite ser muy hábiles a la hora de buscar alimentos. Además, poseen una gran capacidad para resolver problemas, tanto es así que son capaces de abrir tarros con los tentáculos.
A los paquidermos siempre les ha precedido su fama de ser mamíferos con una gran memoria. Pero no solo esto, además es posible que tengan conciencia de su propia existencia. Hace unos años, se demostró que los elefantes asiáticos poseen autoconciencia: mediante la prueba del espejo, el animal reconoció que lo que había frente a él era su propio reflejo. Además, son capaces de utilizar herramientas, otro motivo por el que se considera a este animal inteligente. En ocasiones se ha visto cómo estos mamíferos limpian su comida cuando consideran que puede ser peligrosa. Y, sobre todo, son capaces de sentir compasión por otras especies.
Se trata del ave más inteligente. Son capaces de resolver situaciones de manera lógica, han demostrado tener memoria y son capaces de construir sus propias herramientas. Estos animales son capaces de jugar a placer. De hecho es popular en internet el vídeo viral de un cuervo jugando y revolcándose por la nieve.
Rata
Más allá de la imagen del roedor intentando salir del laberinto o superando pruebas en un laboratorio, este pequeño animal es bastante inteligente. Las ratas son capaces de analizar una situación al integrar varias entradas sensoriales, sueñan de manera similar nosotros. Y, por si fuera poco, demuestran sentir empatía por los demás miembros de su grupo. Por ejemplo, en ocasiones, las ratas más mayores se sacrifican por los ejemplares más jóvenes si consideran que un alimento pueda estar envenenado.
Este cetáceo es uno de los animales más inteligentes del planeta. Además de poseer grandes habilidades sociales y de entablar estrechas relaciones con los miembros de su grupo, tienen un sistema de vocalizaciones bastante complejo. De hecho, son capaces de emitir sonidos distintos para designar a cada uno de los miembros de su grupo.
Comparte el 98% del ADN con el ser humano. Además de poseer conciencia de sí mismo, es capaz de transmitir conocimiento a las generaciones venideras. Se estima que tienen un lenguaje complejo y que son capaces de entender una gran cantidad de signos. Además de tener una gran memoria matemática.
Se considera el invertebrado más inteligente del planeta. Estos cefalópodos aparecieron hace 30 millones de años, aproximadamente. Son capaces de reconocer formas y texturas y guardarlas en su memoria, lo que les permite ser muy hábiles a la hora de buscar alimentos. Además, poseen una gran capacidad para resolver problemas, tanto es así que son capaces de abrir tarros con los tentáculos.
Saben superar pruebas utilizando los tentáculos. Pixabay
ElefanteA los paquidermos siempre les ha precedido su fama de ser mamíferos con una gran memoria. Pero no solo esto, además es posible que tengan conciencia de su propia existencia. Hace unos años, se demostró que los elefantes asiáticos poseen autoconciencia: mediante la prueba del espejo, el animal reconoció que lo que había frente a él era su propio reflejo. Además, son capaces de utilizar herramientas, otro motivo por el que se considera a este animal inteligente. En ocasiones se ha visto cómo estos mamíferos limpian su comida cuando consideran que puede ser peligrosa. Y, sobre todo, son capaces de sentir compasión por otras especies.
Cuando un miembro de la manada fallece, guardan luto. Pixabay
CuervoSe trata del ave más inteligente. Son capaces de resolver situaciones de manera lógica, han demostrado tener memoria y son capaces de construir sus propias herramientas. Estos animales son capaces de jugar a placer. De hecho es popular en internet el vídeo viral de un cuervo jugando y revolcándose por la nieve.
Rata
Más allá de la imagen del roedor intentando salir del laberinto o superando pruebas en un laboratorio, este pequeño animal es bastante inteligente. Las ratas son capaces de analizar una situación al integrar varias entradas sensoriales, sueñan de manera similar nosotros. Y, por si fuera poco, demuestran sentir empatía por los demás miembros de su grupo. Por ejemplo, en ocasiones, las ratas más mayores se sacrifican por los ejemplares más jóvenes si consideran que un alimento pueda estar envenenado.
Las ratas suelen trabajar en equipo. Pixabay
DelfínEste cetáceo es uno de los animales más inteligentes del planeta. Además de poseer grandes habilidades sociales y de entablar estrechas relaciones con los miembros de su grupo, tienen un sistema de vocalizaciones bastante complejo. De hecho, son capaces de emitir sonidos distintos para designar a cada uno de los miembros de su grupo.
Son sociables y saben utilizar herramientas. Pixabay
ChimpancéComparte el 98% del ADN con el ser humano. Además de poseer conciencia de sí mismo, es capaz de transmitir conocimiento a las generaciones venideras. Se estima que tienen un lenguaje complejo y que son capaces de entender una gran cantidad de signos. Además de tener una gran memoria matemática.
Hay casos de chimpancés que son capaces de memorizar números en segundos. Pixabay
martes, 22 de agosto de 2017
Los animales sienten con horas de antelación los terremotos
¿Pueden
los perros, gatos, ovejas o gallinas prever los terremotos? Según la
creencia popular, ciertos animales los sienten con antelación. Pero la
ciencia se muestra escéptica. La última investigación sobre el tema la
ha realizado en Italia el biólogo Martin Wikelski, quien ha descubierto
que ciertos animales, a los que colocó dispositivos
especiales, lo que él llama una «caja negra», sienten antes los
terremotos. Wikelski, director del Instituto de Ornitología Max Planck
de Radolzell en Alemania, se presentó en Italia tras los terremotos del
pasado año que devastaron el centro del país.
Para realizar su investigación, eligió una granja en Pieve Torina, pueblo de 1.400 habitantes en la provincia de Macerata, en la región de Las Marcas, una zona destruida. Y más concretamente escogió la granja de los hermanos Angeli, que producen queso y otras especialidades locales. Con la ayuda de otro científico alemán y los tres hermanos Angeli, Wikelski colocó dispositivos electrónicos, alimentados con pequeños paneles solares, en conejos, ovejas, vacas, pavos, pollos y perros. Ese dispositivo ha registrado el movimiento de los animales, según algunos parámetros: Dirección, velocidad, altitud, temperatura, humedad, aceleración y localización.
El estudio forma parte de un amplio proyecto de investigación ruso-alemán llamado ICARUS (International Cooperation for Animal Research Using Space). Se trata de un sistema para controlar mediante satélite, gracias a dispositivos alimentados con energía solar, las señales o indicaciones de decenas de especies animales.
Muchas pruebas tendrá que mostrar Wikenlski para convencer a la comunidad científica, que en gran parte es escéptica. De momento, el biólogo alemán cuenta con tres entusiastas defensores: Los hermanos Angeli, cuyas fotografías y granja, convertida en laboratorio, han alcanzado los honores de un largo reportaje en destacadas páginas del New York Times, el mejor y más importante periódico del mundo.
Para realizar su investigación, eligió una granja en Pieve Torina, pueblo de 1.400 habitantes en la provincia de Macerata, en la región de Las Marcas, una zona destruida. Y más concretamente escogió la granja de los hermanos Angeli, que producen queso y otras especialidades locales. Con la ayuda de otro científico alemán y los tres hermanos Angeli, Wikelski colocó dispositivos electrónicos, alimentados con pequeños paneles solares, en conejos, ovejas, vacas, pavos, pollos y perros. Ese dispositivo ha registrado el movimiento de los animales, según algunos parámetros: Dirección, velocidad, altitud, temperatura, humedad, aceleración y localización.
Perros y ovejas dan la alarma
Seis meses transcurrió el biólogo Wikenlski controlando en un ordenador los datos que transmitías los dispositivos instalados en los animales. Las conclusiones las expondrá en una revista científica, pero, en un largo reportaje que le ha dedicado el New York Times, Wikenlski adelanta que «el conjunto de las reacciones de los animales puede proporcionar una cierta alarma importante». Según el biólogo alemán los resultados son muy satisfactorios, confirmando que los animales cambian su comportamiento horas antes de que se produzca un terremoto. Con orgullo, uno de los tres hermanos Angeli, Luca, cuenta que antes del terremoto que destruyó su pueblo fue percibido cinco o seis horas antes por algunos animales de su granja: «Los más sensibles y receptivos fueron los perros pastores, nuestros Zeus y Aro. Y después las ovejas», señala Luca.El estudio forma parte de un amplio proyecto de investigación ruso-alemán llamado ICARUS (International Cooperation for Animal Research Using Space). Se trata de un sistema para controlar mediante satélite, gracias a dispositivos alimentados con energía solar, las señales o indicaciones de decenas de especies animales.
Muchas pruebas tendrá que mostrar Wikenlski para convencer a la comunidad científica, que en gran parte es escéptica. De momento, el biólogo alemán cuenta con tres entusiastas defensores: Los hermanos Angeli, cuyas fotografías y granja, convertida en laboratorio, han alcanzado los honores de un largo reportaje en destacadas páginas del New York Times, el mejor y más importante periódico del mundo.
sábado, 19 de agosto de 2017
Así es como los animales ven el mundo
¿Sabes cómo un tiburón ve el mundo?
El hecho de que los animales tengan diferentes estructuras de ojos y diferentes funciones cerebrales, causa que perciban de otra manera los colores y la luz. Por lo cual, no ven como nosotros el mundo.
Lo que ve el ser humano:
Lo que ve un tiburón:
Lo que ve el ser humano:
Lo que ve una mosca:
Lo que ve el ser humano:
Lo que ve el ser humano:
Lo que ve una rata:
Lo que ve el ser humano en la oscuridad de un bosque:
Lo que ve una boa:
jueves, 17 de agosto de 2017
La leyenda budista sobre los gatos
Para el budismo, los gatos representan la espiritualidad. Son seres iluminados que transmiten calma y armonía y, por ello, suele decirse que quien no se relaciona bien con su inconsciente, nunca llega a conectar por completo con un gato ni entenderá tampoco sus misterios.
La verdad es que a nadie le sorprende saber que la figura de estos animales esté unida al budismo. Tanto es así, que en Tailandia existe una preciosa leyenda que ha trascendido en el velo del tiempo hasta convertir a los gatos, en unos seres de paz e íntima unión en muchos templos de los países asiáticos. Es por ello, que resulta muy común ver a los gatos dormitando y hechos un ovillo en el regazo de las múltiples figuras de Buda que orlan los jardines y los santuarios.
Fue en Tailandia y dentro de este contexto donde se escribió “El libro de los poemas del gato” o el Tamra Maew. conservado a día de hoy en la biblioteca Nacional de Bangkok como un auténtico tesoro a preservar. En sus antiguos papiros pudo leerse una encantadora historia donde se contaba que, cuando una persona había alcanzado los niveles más altos de espiritualidad y fallecía, su alma se unía plácidamente al cuerpo de un gato.
La vida podría ser entonces muy corta o lo que la longevidad felina permitiese, pero cuando llegaba el final, esa alma sabía que ascendería a un plano iluminado. A su vez, el pueblo tailandés de aquella época, conociendo esta creencia, llevaba a cabo también otra curiosa práctica…
Cuando un familiar fallecía, se le enterraba en una cripta junto a un gato vivo.
La cripta tenía siempre un agujero por donde el animal podría salir, y
cuando lo hiciera, daban por sentado que el alma del ser amado ya estaba
en el interior de aquel noble gato… De este modo, alcanzaba la libertad
y ese sendero de calma y espiritualidad capaz de preparar a esa alma,
para el camino posterior hacia la ascensión.
Para concluir, sabemos que no hace falta recurrir a los textos budistas para entender que los gatos son especiales, que sus miradas nos transportan a universos introspectivos, que con sus extrañas posturas nos invitan a practicar el yoga, que son un ejemplo de elegancia y equilibrio… Los queremos y hasta los veneramos y, aunque ellos mismos se crean auténticos dioses recordando quizá sus días en el Antiguo Egipto, es algo que les permitimos con orgullo.
Todos disponemos de nuestras propias historias con estos animales, momentos inolvidables que nos han permitido disfrutar de pequeños instantes cargados de magia y autenticidad. Esos que seguramente, sirvieron de inspiración para hilar esta hermosa leyenda budista que quedó impresa en tinta, papel y misticismo. La misma que que hoy hemos querido compartir en nuestro espacio contigo.
La verdad es que a nadie le sorprende saber que la figura de estos animales esté unida al budismo. Tanto es así, que en Tailandia existe una preciosa leyenda que ha trascendido en el velo del tiempo hasta convertir a los gatos, en unos seres de paz e íntima unión en muchos templos de los países asiáticos. Es por ello, que resulta muy común ver a los gatos dormitando y hechos un ovillo en el regazo de las múltiples figuras de Buda que orlan los jardines y los santuarios.
A menudo, suele decirse que tener un perro es disfrutar del compañero más fiel que pueda existir. Algo totalmente cierto. No obstante, quien conoce el carácter de un gato siente que la conexión es más íntima y profunda, de ahí, que diversos monjes budistas como el maestro Hsing Yun, hablen del poder sanador de este animal. Te invitamos a descubrirlo con nosotros.Los gatos ven mucho más allá de nuestros sentidos, entre sus horas de siesta y sus instantes de juego y exploración, ahondan en nuestra alma con su afinado olfato. Alivian tristezas y nos arropan con sus nobles y relucientes miradas.
Una leyenda budista sobre los gatos originada en Tailandia
En primer lugar hemos de saber algo importante. El budismo no está organizado en una jerarquía vertical, como ya sabemos, la autoridad religiosa descansa sobre los textos sagrados pero, a su vez, existe una gran flexibilidad en sus propios enfoques. La leyenda que vamos a mostrarte hunde sus raíces en una escuela en concreto: en el budismo theravada, o el budismo del linaje de los antiguos.Fue en Tailandia y dentro de este contexto donde se escribió “El libro de los poemas del gato” o el Tamra Maew. conservado a día de hoy en la biblioteca Nacional de Bangkok como un auténtico tesoro a preservar. En sus antiguos papiros pudo leerse una encantadora historia donde se contaba que, cuando una persona había alcanzado los niveles más altos de espiritualidad y fallecía, su alma se unía plácidamente al cuerpo de un gato.
La vida podría ser entonces muy corta o lo que la longevidad felina permitiese, pero cuando llegaba el final, esa alma sabía que ascendería a un plano iluminado. A su vez, el pueblo tailandés de aquella época, conociendo esta creencia, llevaba a cabo también otra curiosa práctica…
Los gatos y la espiritualidad
Dicen de los gatos que son como pequeños monjes meditativos capaces de traer la armonía a un hogar. Para la orden budista de Fo Guang Shan, por ejemplo, son como personas que ya han alcanzado la iluminación.- Los gatos son seres libres que beben cuando tienen sed, que comen cuando tienen hambre, duermen cuando sienten sueño y hacen lo que se debe hacer en cada instante sin necesidad de complacer a nadie.
- No se dejan llevar por el ego, y algo especial de estos animales según esta rama del budismo, es que los gatos aprendieron a sentir al hombre desde eras muy lejanas en el tiempo, en cambio, las personas aún no han aprendido a sentir al gato en el presente.
- Son leales, fieles y afectuosos, pero sus muestras de cariño son íntimas y sutiles, y aún así, tremendamente profundas. Solo aquellos que sepan ahondar en su interior, con respeto y dedicación, gozarán de su amor inquebrantable, pero las personas que sean desiguales o que eleven a menudo su voz para gritar, jamás serán de su agrado.
Para concluir, sabemos que no hace falta recurrir a los textos budistas para entender que los gatos son especiales, que sus miradas nos transportan a universos introspectivos, que con sus extrañas posturas nos invitan a practicar el yoga, que son un ejemplo de elegancia y equilibrio… Los queremos y hasta los veneramos y, aunque ellos mismos se crean auténticos dioses recordando quizá sus días en el Antiguo Egipto, es algo que les permitimos con orgullo.
Todos disponemos de nuestras propias historias con estos animales, momentos inolvidables que nos han permitido disfrutar de pequeños instantes cargados de magia y autenticidad. Esos que seguramente, sirvieron de inspiración para hilar esta hermosa leyenda budista que quedó impresa en tinta, papel y misticismo. La misma que que hoy hemos querido compartir en nuestro espacio contigo.
miércoles, 16 de agosto de 2017
La empatía en los perros: un poder sanador
La ciencia ha podido demostrar algo que muchos ya sabíamos: la empatía en los perros. Los perros conectan con el estado emocional de las personas de forma casi inmediata.
Sin embargo, su capacidad va un poco más allá de esa fascinante
conexión, porque también demuestran el deseo expreso y altruista de
ofrecer consuelo, de aliviar la angustia emocional y la tristeza.
Somos conscientes de que cualquiera que tenga uno o más perros coincidirá con las conclusiones a las que se llegaron en el estudio realizado en la Universidad de Londres al respecto de este tema. Sabemos que estos amigos de cuatro patas, nariz húmeda y mirada fiel, sintonizan al instante con nuestra alegría y ante todo, con nuestros sufrimientos. De ahí que no duden ni un momento en lamernos la mano, en tirarnos a los pies su juguete preferido o en sentarse sobre nuestro regazo como niños zalameros que buscan despertarnos una sonrisa.
La empatía en los perros, esa hábil lectura sobre nuestros estados anímicos tiene en realidad matices aún más sorprendentes que nos explican en este mismo trabajo. Un ejemplo de ello lo podemos ver en un caso muy concreto. Benjamin Stepp es un veterano de la guerra de Irak que vive con una preciosa perra labrador llamada Arleigh. Este joven sufrió una lesión cerebral traumática que cada día, se traduce en súbitos ataques de dolor que inmovilizan sus piernas.
Arleigh intuye cuándo van a darse estos ataques y acude de inmediato junto a su dueño con un fin muy concreto: darle apoyo, cariño, reducir su ansiedad y controlar su respiración para que el dolor se vaya lo antes posible. Esa relación entre ambos es tan fascinante que una etóloga, Natalia Alburquerque, está estudiando el caso. Se sabe que los perros “huelen” ciertos cambios metabólicos en nuestro organismo que se traducen por ejemplo en bajadas de azúcar, ataques de epilepsia y, en este caso, la llegada del dolor.
No obstante, uno de los aspectos que más asombra de todo ello es la fidelidad y altruismo de estos animales. No quieren nada a cambio, su sentido de protección y afiliación es tan elevado que el mero hecho de conferir alivio y bienestar ya les gratifica, ya les satisface…
Es necesario tener en cuenta también que la empatía es una dimensión psicológica compleja donde se ponen funcionamiento procesos cognitivos muy sofisticados. En la empatía en los perros, llama la atención su facilidad para leer nuestras expresiones faciales, nuestro tono de voz y su actitud natural para “contagiarse” emocionalmente de nuestros mismos estados. Sin embargo, en el caso de que esa emoción sea negativa inician al momento conductas voluntarias para conferir ayuda, apoyo y bienestar.
Este último aspecto es sin duda un tema que siempre ha fascinado a los expertos. La razón de por qué los perros muestra un vínculo tan fuerte con nosotros podemos hallarla en nuestros ancestros, en nuestro pasado más primitivo. Edward Osborne Wilson es un entomólogo y biólogo estadounidense que nos explica en sus múltiples trabajos aspectos realmente interesantes.
Por curioso que nos parezca es lo que han hecho siempre: convivir con nosotros desde que nuestros antepasados, los cazadores recolectores europeos empezaron a domesticar a las crías de lobo más dóciles que merodeaban por sus asentamientos en busca de comida. Los hicimos nuestros y ellos nos hicieron suyos en una alianza perdurable y maravillosa. De ahí que la mayoría de nosotros no podamos evitar sonreir al instante cuando nuestra mirada se cruza con un perro.
Para concluir, que alguien ponga en duda el poder emocional de los perros y su habilidad empática es sin duda un error imperdonable. Porque ahí tenemos a esos héroes anónimos de cuatro patas a los que tanto les debemos: los perros guía, los perros que ayudan diariamente a niños con discapacidades o a ancianos dependientes y en resumen, a todos esos grandes amigos a los que adoramos y que no dudamos en considerar parte indiscutible de nuestra familia.
Somos conscientes de que cualquiera que tenga uno o más perros coincidirá con las conclusiones a las que se llegaron en el estudio realizado en la Universidad de Londres al respecto de este tema. Sabemos que estos amigos de cuatro patas, nariz húmeda y mirada fiel, sintonizan al instante con nuestra alegría y ante todo, con nuestros sufrimientos. De ahí que no duden ni un momento en lamernos la mano, en tirarnos a los pies su juguete preferido o en sentarse sobre nuestro regazo como niños zalameros que buscan despertarnos una sonrisa.
La empatía en los perros, esa hábil lectura sobre nuestros estados anímicos tiene en realidad matices aún más sorprendentes que nos explican en este mismo trabajo. Un ejemplo de ello lo podemos ver en un caso muy concreto. Benjamin Stepp es un veterano de la guerra de Irak que vive con una preciosa perra labrador llamada Arleigh. Este joven sufrió una lesión cerebral traumática que cada día, se traduce en súbitos ataques de dolor que inmovilizan sus piernas.
Arleigh intuye cuándo van a darse estos ataques y acude de inmediato junto a su dueño con un fin muy concreto: darle apoyo, cariño, reducir su ansiedad y controlar su respiración para que el dolor se vaya lo antes posible. Esa relación entre ambos es tan fascinante que una etóloga, Natalia Alburquerque, está estudiando el caso. Se sabe que los perros “huelen” ciertos cambios metabólicos en nuestro organismo que se traducen por ejemplo en bajadas de azúcar, ataques de epilepsia y, en este caso, la llegada del dolor.
No obstante, uno de los aspectos que más asombra de todo ello es la fidelidad y altruismo de estos animales. No quieren nada a cambio, su sentido de protección y afiliación es tan elevado que el mero hecho de conferir alivio y bienestar ya les gratifica, ya les satisface…
El contagio emocional en los perros, una forma primitiva de empatía
Los etólogos y psicólogos especializados en el mundo animal nos puntualizan un aspecto importante. No podemos comparar la empatía humana con la empatía en los perros. En este último caso prefiere hablarse más bien de “contagio emocional”, una forma muy primitiva de empatía y que según Ted Ruffman, psicólogo de la Universidad de Otago podría compararse a la que puede tener, por ejemplo, un niño de tres años.Es necesario tener en cuenta también que la empatía es una dimensión psicológica compleja donde se ponen funcionamiento procesos cognitivos muy sofisticados. En la empatía en los perros, llama la atención su facilidad para leer nuestras expresiones faciales, nuestro tono de voz y su actitud natural para “contagiarse” emocionalmente de nuestros mismos estados. Sin embargo, en el caso de que esa emoción sea negativa inician al momento conductas voluntarias para conferir ayuda, apoyo y bienestar.
Este último aspecto es sin duda un tema que siempre ha fascinado a los expertos. La razón de por qué los perros muestra un vínculo tan fuerte con nosotros podemos hallarla en nuestros ancestros, en nuestro pasado más primitivo. Edward Osborne Wilson es un entomólogo y biólogo estadounidense que nos explica en sus múltiples trabajos aspectos realmente interesantes.
Perros y humanos: un vínculo muy antiguo
El ser humano estableció un lazo emocional muy intenso con los perros desde esas épocas remotas, esas donde nuestra máxima prioridad era sobrevivir. Una de las teorías del doctor Edward Osborne es que aquellos humanos que en sus grupos sociales contaban con la compañía de varios perros, tenían mayores de seguir con vida que aquellos que aún no disponían de este vículo.- Tener uno o varios perros en nuestros primeros asentamientos sociales suponía estar más unido la naturaleza, a sus ciclos y encontrar también más recursos con los que sobrevivir: agua, caza, plantas comestibles… De hecho, disponemos de múltiples pinturas rupestres donde se puede ver este tipo de interacción.
- La compañía de estos animales nos confirió desde muy temprano un tipo de satisfacción vital muy relevante, dando forma a un lazo donde estaban implicados a su vez múltiples mecanismos biológicos.
Esta interacción constante iniciada desde aquellas épocas tempranas afianzó una sofisticada relación donde los perros no tardaron en reconocer nuestras emociones y donde nosotros, a su vez aprendimos a verlos como un miembro más de nuestros grupos sociales. La empatía en los perros es una realidad que siempre nos ha acompañado.Se sabe por ejemplo que mirar a los ojos a un perro genera que nuestro cerebro segregue
Basta con mirar a un perro para sonreír al instante
Nuestros perros no nos dirán nunca que nos cojamos las cosas con más calma. No nos recomendarán que cambiemos de trabajo, que le demos otra oportunidad a nuestra pareja o que dejemos ir para siempre a esa amiga que nos trae más problemas que beneficios. Ellos jamás te recomendarán nada, ni te juzgarán ni criticarán ninguna de tus decisiones. Tus perros se limitarán solo a “estar” ahí, contigo, dándote lo mejor de ellos mismos a cambio de nada. Siendo uno de los comportamientos delatores de la empatía de los perros.Por curioso que nos parezca es lo que han hecho siempre: convivir con nosotros desde que nuestros antepasados, los cazadores recolectores europeos empezaron a domesticar a las crías de lobo más dóciles que merodeaban por sus asentamientos en busca de comida. Los hicimos nuestros y ellos nos hicieron suyos en una alianza perdurable y maravillosa. De ahí que la mayoría de nosotros no podamos evitar sonreir al instante cuando nuestra mirada se cruza con un perro.
Nos reconocemos, nuestros mecanismos biológicos interaccionan de nuevo para producir respuestas emocionales positivas. Fueron nuestra alianza en el pasado y son nuestros aliados terapéuticos en el presente. Nos traen calma, nos hacen sonreír, activan nuestras endorfinas, nuestra oxitocina, alivian soledades e incluso reducen nuestra sensación de dolor…
Para concluir, que alguien ponga en duda el poder emocional de los perros y su habilidad empática es sin duda un error imperdonable. Porque ahí tenemos a esos héroes anónimos de cuatro patas a los que tanto les debemos: los perros guía, los perros que ayudan diariamente a niños con discapacidades o a ancianos dependientes y en resumen, a todos esos grandes amigos a los que adoramos y que no dudamos en considerar parte indiscutible de nuestra familia.
martes, 15 de agosto de 2017
Abandona a su perra de 11 años en un refugio y pide que hagan algo horrible con ella
Trabajar en un refugio o protectora de animales es una de la tareas más duras a la vez que gratificantes en la que puede volcarse un ser humano. Cada día te enfrentas a la frustración de no contar con todos los medios que necesitas, a la crueldad e irresponsabilidad de las personas que abandonan y maltratan, ves enfermedades y ves muerte, pero también ves la cantidad de amor, entrega y agradecimiento de los animales a los que ayudas.
Una señora se levantó una mañana, tomó a su perra de 11 años y la llevó a un refugio de la ciudad. Cuando llegó al centro, entregó al animal y le pidió a los voluntarios que sacrificasen a su perra porque “estoy harta de ella”.
Obviamente, en la protectora acogieron a Mitsie haciendo oídos sordos a la absurda y cruel petición de su dueña. Lo que hicieron, sin embargo, fue publicar su historia en las redes sociales para denunciar hasta dónde puede llegar la maldad humana.
Con Facebook echando humo, la historia de Mitsie se hizo conocida en toda la ciudad, y no dejaron de llegar mensajes de apoyo y solicitudes de adopción.
Finalmente, gracias a la difusión de su historia, Mitsie encontró una familia adoptiva con la que pasaría sus últimos años rodeada del amor y el cariño que merecía. Porque, por suerte, hay humanos que equilibran la balanza de quienes solo tienen oscuridad en sus corazones.
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